Tuesday, December 26, 2006

 
Olvidarte era una utopía, un engaño, algo que jamás conseguiré. No sé cómo pude plantearme que sacarte de mi cabeza iba a ser posible. No lo es, nunca lo será. Nunca podré pasar un día entero sin acordarme de ti por algo. Nunca oiré una canción de reproche sin pensar en que está dedicada a ti.
Me acuerdo de ti con las cosas más simples y cotidianas del día. Como cada vez que me ducho, recuerdo tus intromisiones descaradas en el baño, cómo descorrías la cortina y me espiabas mientras me duchaba, y los sustos que me pegabas. Aún hoy pienso que voy a descorrer la cortina y te voy a encntrar ahí, al otro lado.
También recuerdo la primera vez que cocinaste para mí, hiciste una ensalada de pasta vomitiva, aquel día no comí nada con la excusa de que estaba desganada y en realidad estaba muerta de hambre. Siempre fuiste un cocinero patético.
En general fuiste una persona patética, fue realmente una lástima no haberme dado cuenta antes.

Saturday, September 23, 2006

 

Algunos logros...

Bueno, ya he conseguido algunos logros con respecto a mi obsesión compulsiva hacia ti.
Lo primero que he hecho es no leer más tu blog. Leer todos los planes que tienes con tu novia, las cosas que haces sin mí, las ideas que se te ocurren si que yo esté a tu lado... Prefiero no saber nada. Siempore crei a pies juntillas en eso de "ojos que no ven...".
La verdad es que me pareces un estúpido. Sé que no eres feliz, y que extrañas en ella cosas que tenías conmigo. Pero, ¿qué hacer ahora? Yo jamás volvería a tu lado, ni tú al mío.
Tendremos que pasar el resto de nuestras vidas pensando que pudo haber sido y no fue...

Wednesday, August 23, 2006

 

basta

Ya basta, ya es suficiente.
Ya no puedo continuar así. No por más tiempo.
Mi cabeza va a estallar, mis ojos van a reventar.
Tengo que olvidarte, necesito olvidarte.
Y lo necesito cuanto antes.

Thursday, August 17, 2006

 

¿en qué estrella estarás?

¿Qué estarás pensando en estos momentos?
¿Te estarás riendo de esa manera tan escandalosa como solías hacer?
¿Estarás soñando despierto?
¿Pensando quizás en lo que vas a hacer esta noche de cena?
¿Te estarás rascando la cicatriz de tu rodilla derecha? (ha cambiado el tiempo y seguramente lo notarás en tu rodilla machacada)
¿Bostezando?
¿Peleándote con alguno de tus compañeros de trabajo?
¿Maldiciendo a tu jefe? (eso seguro)
¿Estarás escribiendo un diario con recuerdos de hace 6 años?
¿Enorgulleciéndote de la jugarreta que me hiciste?
O quizás... ¿pensando en ella?
¿Cogiendo su mano?
¿Escribiéndole un sms?
¿Comparándola conmigo?

Wednesday, August 16, 2006

 

¿recuerdas?

Esta mañana, al saltar el despertador, ha sonado una canción de Diego El Cigala que solía escuchar cuando me dejaste:
"En la vida hay amores que nunca pueden olvidarse,
imborrables momentos que siempre guarda el corazón.
Porque aquello que un dia nos hizo temblar de alegria
es mentira que hoy pueda olvidarse con un nuevo amor"
La canción me ha hecho estremecer. Es cierto que contigo temblé de alegría numerosas veces, y sé que tú también temblaste de alegría conmigo, por eso no puedo creer que hayas borrado, con otro amor, todos mis recuerdos.
Me gusta pensar que, al menos una vez al día, piensas en mí.
Pienso que piensas en mis manos sobre tu cuerpo, en mi risa, en mi olor (- Me gusta como hueles - ¿A qué huelo? - A ti), en mis preguntas tontas, en mis pies.
Así me engaño pensando que no todas esas cosas han caído en el saco roto del olvido.

Monday, August 14, 2006

 
Galicia se quema.
Hoy no he podido evitar acordarme de nuestro viaje a Galicia juntos, el año en el que un viejo barco vomitó alquitrán sobre sus costas.
De nuestra cara de felicidad al ver que estábamos arreglando algo que tenía la pinta de durar mucho (ilusa). De aquella foto tuya en el mirador de Finisterre, observando el mar, con la mirada perdida. No sé si entonces ya pensabas en ella más que en mí. Si era así, lo disimulabas muy bien. De las mariposas, siempre las mariposas, que volaban en mi tripa minutos antes de que mi tren llegase al andén para verte recogerme con tu cara de sueño.
Era mi momento de felicidad, nuestro pequeño momento de felicidad que sólo nosotros podíamos disfrutar y comprender, que sólo nosotros sabíamos a qué se debía, y que sólo nosotros podíamos hacer que se acabase, tal y como hicimos.
En aquel viaje me repetiste una y otra vez que tú no podrías vivir sin mí. Yo te sonreía, porque no era capaz de asimilar las palabras que nunca me habían dicho, las frases hechas que se dicen en las pelis tontas americanas y que sabes que no son verdad, pero que suenan de maravilla.
Después, cuando antepusiste tus genitales a tu corazón y te acostaste con media ciudad a mis espaldas, me confesaste que nunca habías vuelto a hacer un viaje tan bonito como aquel, no por el sitio (que también), sino por mi compañía.
Desde entonces ando vagando de ciudad en ciudad, de país en país. Queriendo encontrar la misma felicidad que tuve en ese viaje. Busco repetir las mismas sensaciones, los mismos sentimientos. Añoro las mariposas en el estómago y el dormir abrazada a tu barriga sobre nuestro colchón inflable. Añoro tus frases (mentiras) de película tonta americana.
Y soy incapaz de encontrar nada de eso, aunque me recorra los 5 continentes, aunque visite todas las ciudades que existen en la tierra, porque todos mis viajes son si ti.
Porque no estás tú.
No estás tú.
No estás tú...

Friday, August 11, 2006

 

tristura 2

También recuerdo la primera vez que te vi, y de cómo pensé "qué chico más feo", antes de enamorarme de ti.
Recuerdo que tú llevabas una camisa de cuadros horrible y 2 tallas más grandes de la cuenta. Yo llevaba un jersey de lana bonito, aunque 2 tallas más pequeñas de la cuenta, que me dejaba los riñones al aire (nunca te lo dije, pero no volví a ponerme nunca más ese jersey, aunque aún lo guardo en un cajón) por donde se colaba el aire frio de un mes de diciembre cualquiera en tu ciudad.
Y todo mi cuerpo temblaba, aún no sé si por el frío o por tu roce.
Fuiste la historia de amor más bonita que jamás viví, aunque tú no lo sepas.
Fuiste los nervios de la primera cita, la sorpresa del primer beso, la emoción del primer encuentro, el temblor de piernas del primer paseo, la lágrima de la primera despedida, la sonrisa del primer reencuentro, la confianza del primer amor de verdad.
Fuiste la palabra de aliento en un día gris, el hombro en el que derramar una lágrima fugaz, la mano a la que agarrarme al andar, el beso en el momento oportuno, la sonrisa en un instante de angustia, la luz en una noche oscura, la manta en el día en el que el frio me calaba los huesos.
Lo fuiste todo, y fuiste mucho más que eso.
Porque lo fuiste sin dejar de ser TÚ.

This page is powered by Blogger. Isn't yours?

page counter
HTML Hit Counter